Ni ebria ni dormida me haría un test de #coronavirus para que me internen en Argentina, aunque me regalasen la atención sanitaria y me atienda como médico de cabecera el mismísimo Hugh Laurie vestido de Dr.House y me lo ordene tocando el piano.
Los árboles mueren de pie. Y los tontos, en camas de hospital.
Me quedo en casa aislada y sigo indicaciones de algún médico virtual. Es la mejor manera de no propagar el virus.
Por otra parte, en dictadura -sin jueces, ni poder legislativo, ni administrativo, ni bancos, ni prensa libre- es peligroso para quien no simpatice con el gobierno, que tiene así la suma del poder pùblico y la excusa perfecta para eliminar gente. No te horrorices. ¿Qué puedo pensar de un personaje como el Presidente que en 2006, estaba AF en funciones como jefe de gabinete y fui forzada a subir a una ambulancia, en la puerta de Canal 13, ante la vista de varios testigos y con presencia policial, contra mi voluntad y con la complicidad del SAME me quiso internar en el Moyano. Me salvé esa vez, gracias al Derecho y a que intervino el Secretario del Juzgado, y me respaldaban los DD HH.
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